Estilo clásico
El estilo clásico es una forma de decorar los espacios interiores que se basa en la armonía, el equilibrio y la elegancia. Se inspira en las épocas antiguas, como el Renacimiento, el Barroco o el Neoclásico, y utiliza elementos como la madera, el mármol, el terciopelo, el dorado y las molduras. Busca crear ambientes acogedores, refinados y atemporales, que transmitan una sensación de distinción y buen gusto.
Estilo clásico en decoración de interiores
El estilo clásico en decoración de interiores es una decoración tradicional, elegante y cálida, opuesta al minimalismo.
Madera
La madera es la gran protagonista en el estilo clásico. También la seda, la porcelana, terciopelo, y otros materiales y textiles que aporten un toque distinguido y elegante a la decoración.
Elementos metalizados
También los elementos metalizados en dorado y plata aportan esa misma elegancia y un toque distinguido. Si te gustan los pisos regios, con techos altos y una decoración elegante, aunque el tuyo no tenga molduras de origen ni lámparas de araña, puedes conseguir que respire un estilo clásico. Garantía de éxito seguro.
Características de la decoración clásica
Algunas de las características de la decoración clásica son:
– El uso de materiales nobles y de calidad, como la madera, el mármol, el cristal, la seda o el terciopelo.
– La presencia de elementos decorativos que aportan elegancia y distinción, como las lámparas de araña, los espejos de marco ancho, los cuadros, los candelabros o los jarrones.
– La búsqueda de la armonía y el equilibrio mediante la distribución simétrica y ordenada de los objetos.
– La inspiración en las épocas antiguas, como el Renacimiento, el Barroco o el Neoclásico, con sus curvas, sus molduras y sus detalles.
– El predominio de los colores neutros y pastel, que crean un ambiente cálido y acogedor.
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